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Los datos de la campaña “Ser Dona al Sud” en su 13 edición de este 2019, hablan por sí solos y demuestran la gran acogida y la participación activa de los municipios socios del Fons Valencià. Un total de 937 personas son las que han participado en alguna de las actividades que se han desarrollado a lo largo de las dos semanas que ha durado la campaña: 14 conferencias y reuniones de trabajo, talleres con los y las alumnas de bachillerato de 10 institutos, con una cobertura mediática de 2 entrevistas de radio y 1 de televisión y el seguimiento por redes sociales.
Acompañados por los técnicos de Educación para el Desarrollo del Fons Valencià, Natxo Peñarrocha y Natalia Enguix, la delegación de mujeres bolivianas compuesta por Martina Espinoza y Jimena Calizaya también han recibido la afectuosa bienvenida de las diferentes autoridades municipales de los 19 municipios donde han podido compartir su experiencia.
En la despedida de esta enriquecedora vivencia y encuentro cultural, tanto para las mujeres bolivianas, como para todas aquellas personas que han podido escucharlas y conocer de cerca su historia de superación personal y compromiso social, Martina y Jimena han destacado el valor de las oportunidades que las mujeres viven y tienen en Europa, a pesar de que aún queda mucho camino por recorrer.
La presidenta del Fons, Xelo Angulo, también ha querido manifestar su inmensa satisfacción por haber compartido diversos momentos de esta campaña con Martina y Jimena a las que ha agradecido “su ejemplo y su vocación, porqué se trata de un valor inspirador para todas y todos nosotros, en la Comunitat Valenciana, en España y en Europa, porqué el sacrificio que hacen estas mujeres y sus familias es digno de admirar”.
Y es que cabe destacar que las mujeres representantes de las organizaciones de mujeres en Bolivia no pueden trabajar en ninguna otra ocupación ni tienen remuneración económica por su labor, con la correspondiente delegación de funciones que en muchos casos deben de asumir el resto de los miembros de la familia. “Nosotras no tenemos el aporte económico que tienen los hombres y no podemos trabajar si somos dirigentes de la organización en nuestra región. Además, si te eligen las compañeras y te dan su confianza, tienes que cumplir, aunque signifique un sacrificio enorme. En mi caso tengo que levantarme a las 3 de la madrugada para hacer la masa de los “pansitos” que luego venden mis hijas y con lo que sacamos, vivimos”.
Es una de las muchas anécdotas que Martina ha dejado en esta campaña